Después de la pequeña
decepción que nos llevamos en el Canyolands, pusimos rumbo al Arches National Park. Esta es la parte más al norte que llegamos a estar, pero no en la que más frío pasamos aunque la verdad es que para que vamos a engañarnos
también hizo bastante frío, aunque solo con 5 grados bajo cero. Este parque nos ha gustado bastante, pero en alguna zona se nos ha hecho un poco dura la caminata, había bastante cuesta arriba, pero claro viendo que había gente totalmente inconsciente, que metía a sus hijos por esos senderos, pues seguimos hacia adelante. Algunas partes del camino estaban muy congeledas y iran estrechas asi que hemos tenido que
andar con mucho cuidado de no caernos. En el arco más bonito del parque hemos parado a comer teniendo de nuevo unas vistar privilegiadas y hemos estado observando como un padre andaba con su hijo sin hacerle mucho caso al borde
de un precipicio por el que un pequeño despiste le hubiera costado la vida, la verdad es que lo hemos pasado nosotros peor que el padre, el cua
l no parecia importarle mucho su hijo ni prestarle mucha atención. Hemos tenido una de las peores esperiencias del viaje, pero bueno nada que no se pued
a solucionar con dinero. Hemos querido hacernos una foto con el tripode y en una
rafaga de viento nos ha tirado la camara y se nos ha roto, pero bueno como he dicho antes, nada que no pueda solucionarse con dinero. En el último sendero
se nos hizo un poco de noche, pero fue divertido siguiendo a una familia de japos, cuyo padre les fustigaba y les llevaba a todos a un ritmo frenetico para poderse ir haciendo fotos en cada esquina, y uno por uno, como si fuera las fotos para el pasaporte, primero la mujer, despues hija, hijo y por ultimo él, y para terminar una foto de los 4 juntos. Además íban con una vestimenta poco apropiada para los caminos helados,
pero no se resvalaban ni una sola vez, a diferencia de nosotros que en ocasiones, hasta nos dejabamos caer diractamente de culo por las cuestas para evitar la caida.
decepción que nos llevamos en el Canyolands, pusimos rumbo al Arches National Park. Esta es la parte más al norte que llegamos a estar, pero no en la que más frío pasamos aunque la verdad es que para que vamos a engañarnos 
también hizo bastante frío, aunque solo con 5 grados bajo cero. Este parque nos ha gustado bastante, pero en alguna zona se nos ha hecho un poco dura la caminata, había bastante cuesta arriba, pero claro viendo que había gente totalmente inconsciente, que metía a sus hijos por esos senderos, pues seguimos hacia adelante. Algunas partes del camino estaban muy congeledas y iran estrechas asi que hemos tenido que 
andar con mucho cuidado de no caernos. En el arco más bonito del parque hemos parado a comer teniendo de nuevo unas vistar privilegiadas y hemos estado observando como un padre andaba con su hijo sin hacerle mucho caso al borde
de un precipicio por el que un pequeño despiste le hubiera costado la vida, la verdad es que lo hemos pasado nosotros peor que el padre, el cua
l no parecia importarle mucho su hijo ni prestarle mucha atención. Hemos tenido una de las peores esperiencias del viaje, pero bueno nada que no se pueda solucionar con dinero. Hemos querido hacernos una foto con el tripode y en una 
rafaga de viento nos ha tirado la camara y se nos ha roto, pero bueno como he dicho antes, nada que no pueda solucionarse con dinero. En el último sendero 
se nos hizo un poco de noche, pero fue divertido siguiendo a una familia de japos, cuyo padre les fustigaba y les llevaba a todos a un ritmo frenetico para poderse ir haciendo fotos en cada esquina, y uno por uno, como si fuera las fotos para el pasaporte, primero la mujer, despues hija, hijo y por ultimo él, y para terminar una foto de los 4 juntos. Además íban con una vestimenta poco apropiada para los caminos helados, 
pero no se resvalaban ni una sola vez, a diferencia de nosotros que en ocasiones, hasta nos dejabamos caer diractamente de culo por las cuestas para evitar la caida. 
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